Hemos visto todo tipo de curiosas y singulares amistades en el mundo animal, que van desde un elefante y un perro, un trío de amigos entre un león, un tigre y un oso e incluso entre un jabalí y un perro, pero esta vez debo admitir que me sorprendí bastante al saber que un tigre terminó encontrando un gran amigo en su cena.
En el Parque Primorsky en Rusia, todo estaba preparado para alimentar a su tigre siberiano. Habían escogido a una saludable y carnosa cabra que entraría a la jaula del tigre donde éste podría cazarla como lo habría hecho con su presa en su ambiente natural. Pero para sorpresa de sus cuidadores, no todo salió según lo planeado.
Una vez dentro de la jaula, la cabra llamó la atención del tigre que comenzó a acercarse sigilosamente con intenciones de convertirla en su cena, pero esta cabra no estaba lista para morir.

Se armó de valor y comenzó a correr decidida en dirección al tigre, y el gran felino, bastante sorprendido y confundido, no tuvo otra salida más que correr mientras la cabra lo perseguía.
Pese a que el tigre ya había cazado cabras antes, ya que los alimentan con presas vivas al menos dos veces a la semana, aparentemente este tigre decidió que no sería muy buena idea comerse a tal feroz animal.
“La cabra fue bastante valiente. Le mostraba sus cuernos y se defendía cada vez que el tigre atacaba. El cauteloso tigre estaba confundido así que decidió mejor no meterse con la cabra”
– Dmitry Mezentsev, el director del parque–
¿Lo mejor de todo? Desde entonces el tigre no ha intentado comerse a la cabra, y parecieran haber entablado una linda amistad.
Los cuidadores suelen verlos caminando juntos y usualmente la cabra sigue los pasos del tigre donde quiera que éste vaya. incluso se ve un poco preocupada cuando no ve al tigre cerca y comienza a buscarlo.
Quién lo diría… el tigre debió pensar que una cabra con ese espíritu era digna de convertirse en su amiga.