Uno de los problemas ecológicos más grandes que tiene el planeta es el tratamiento de desechos. Millones de toneladas de basura son desechadas generando problemas tanto en el aire como en la salud de las personas. Sin duda es una situación que eventualmente traerá repercusiones a nivel mundial, pero ¿qué pasaría si se pudiesen tratar todos los residuos para aprovechar el gas que emiten?
Mientras buscaban una solución viable para este problema, Oshik Efrati junto con Erez Lanzer y Yair Teller crearon la compañía Home Biogas en Israel, donde crearían un increíble invento que podría cambiar la vida de millones de personas: el Teva-gas.
Este es un sistema de biogás doméstico que permite tratar los desechos orgánicos: se colocan dentro de la máquina y a través de un proceso natural se produce el gas que Oshik usa para cocinar, calefaccionar e iluminar su propio hogar sin la necesidad de utilizar electricidad. Dependiendo de la cantidad de alimentos o desechos de animales que se coloquen se puede calcular cuánto durará el gas que produzca.
Su funcionamiento es muy simple: primero se colocan todos los desechos de comidas en su interior, con un poco de agua y una trituradora manual se encarga de minimizarlos al máximo.

Luego mueve la manija del Teva-gas y sólo queda esperar que las bacterias hagan su trabajo. Estas descomponen los desechos y se produce un gas que se recolecta en el tanque. Este sistema genera su propia presión y mediante una manguera es posible enviarlo directamente hacia la cocina o baño.
Además produce fertilizante líquido que sirve para plantar cualquier tipo de alimento en la tierra.

La gracia de todo es que el dispositivo puede ser utilizado en varios países en vías de desarrollo, con el fin de aportar un granito de arena para quienes lo necesiten. Así los hogares particulares podrán recibir energía y permitirá a los consumidores tener un ciclo cerrado de energía en sus propios hogares.
¿Lo usarías en casa?