Una niña de 6 años llamada Peyton tenía el gran deseo de aprender a andar en patineta. Ella se lo dijo a su madre, pero también le confesó que sabía que el mundo pensaba que eso era más para hombres que para chicas. Jeanean Thomas, su mamá, le explicó que no hay actividades que sean “cosas de hombres” o “cosas de chicas”, sino que solamente son “cosas”.
La niña entendió lo que le estaba diciendo y no pudo más de felicidad cuando recibió de obsequio una vieja patineta lista para ser usada.

Juntas fueron al parque de Cambridge, en Ontario. Al entrar se dieron cuenta de que había un grupo de jóvenes con sus skates.
Ellos fumaban, se reían y maldecían constantemente. Jeanean pensó que los muchachos se burlarían de Peyton por ser tan pequeña y no saber usar su patineta, de hecho la pequeña miró esto y dijo: “Mamá, está lleno de chicos mayores”. Ella le hizo ver que no era importante y que podía practicar con normalidad, así que se puso su casco y comenzó a andar.

De pronto, uno de los muchachos del grupo se fijó en Peyton y fue hacia ella.

Jeanean estaba preparada para decirle que su hija tenía el mismo derecho a usar el parque que ellos, pero no fue necesario hacerlo. El chico se acercó a la niña y le explicó que sus pies estaban mal puestos sobre la tabla. Así él mostró su intención de ayudarla; se agachó y le mostró la manera correcta de pararse. Finalmente terminó pasando alrededor de 1 hora con Peyton enseñándole los trucos básicos de la patineta, no le importó que sus amigos lo miraran riéndose.
Las buenas intenciones del muchacho hicieron que Jeanean Thomas le escribiera una carta de agradecimiento, la cual publicó en su cuenta de Twitter.

“Quiero que sepas que estoy orgullosa de que seas parte de la comunidad. Y quiero agradecerte por ser amable con mi hija, aunque tus amigos se hayan burlado de ti por eso. Ella se fue del parque de patinetas con una sensación de orgullo y confianza, ahora cree que puede hacer lo que sea gracias a ti”
-Jeanean Thomas-
Antes de irse del lugar, Jeanean le dijo a su hija “ese chico fue muy amable por ayudarte de la manera en que lo hizo”. Peyton asintió y luego se dio vuelta y corrió donde él para darle las gracias y dedicarle una sonrisa.
Esta es la carta de agradecimiento completa que publicó en Twitter:
Querido muchacho del parque de patinetas:
Probablemente tienes 15 años, así que no espero que seas muy maduro o que te guste que las niñas pequeñas anden en tu parque de patinetas.
Lo que no sabes es que mi hija ha estado queriendo andar en patineta por meses. De hecho, tuve que convencerla de que esto no era sólo para chicos.
Así que cuando entró en el parque y vio que estaba lleno de adolescentes que fumaban y maldecían, ella inmediatamente se dio la vuelta para volver a casa.
Yo secretamente también quería devolverme, no quería ponerme en el papel de mamá y tener que discutir con ustedes.
Tampoco quería que mi hija sintiera que debía estar asustada o que no tenía el mismo derecho de estar ahí que ustedes.
Así que cuando me dijo “mamá, está lleno de chicos mayores”, yo le dije de manera calmada “Y qué, ellos no son los dueños del lugar”.
Luego ella bajó la rampa a pesar de que tú y tus amigos volaban con sus patinetas a su lado.
Ella sólo alcanzó a dar dos o tres vueltas antes de que tú llegaras y le dijeras “Oye, discúlpame…”
Yo me prepararé para ir y responder: “Ella puede usar este parque tanto como ustedes, muchachos”, pero entonces te escuché decir, “Tus pies están mal, ¿puedo ayudarte?”.
Así pasaste casi una hora enseñándole a mi hija cómo debía balancearse y ponerse de pie sobre la table, ella te escuchaba atentamente -algo que muchos adultos no logran.
Tú sostuviste su mano y la ayudaste cuando ella se cayó, incluso te escuché decirle que se mantuviera alejada de los fierros para que no saliera herida.
Quiero que sepas que estoy orgullosa de que seas parte de la comunidad. Y quiero agradecerte por ser amable con mi hija, a pesar de que tus amigos se hayan reído de ti por eso.
Ella se fue del parque de patinetas con una sensación de orgullo y confianza, ahora cree que puede hacer lo que sea gracias a ti.
Jeanean cuenta que Peyton ahora patina todo el tiempo y que está muy entusiasmada por seguir aprendiendo. Sin duda la ayuda del joven le hizo tener confianza.
¿Qué piensas de esto?