Creí que no era malo entregarle todo al hombre que amas, creí que eso era lo que se hacía cuando se tenía una pareja pero me equivoqué. Tuve muchos problemas emocionales con mi ex pareja y me sentía tan devastada que visité el psicólogo; realmente necesitaba ayuda. Él me dijo que soy “una mujer que ama demasiado”.
Realmente a primer estancia no comprendí a qué se refería y me sugirió que leyera el libro de Robin Norwood “Las mujeres que aman demasiado”. Pareciera chiste pero me identifiqué con la mayoría de casos que se exponen ahí. Me di cuenta de que es bueno amar pero no llegar al límite de lo que yo llegué. Les contaré, y por favor no me juzguen. A veces nos cegamos y simplemente no vemos las cosas tan evidentes que tenemos que ver.
Tenía una pareja, y lo amé como no había amado antes, lo complacía con todo lo que me pedía por ejemplo cocinarle a las 2 de la mañana o a la hora que él quisiera y no fueran adecuadas para ello. Le perdoné que me dejara plantada por irse con sus amigos a tomar cerveza, que se olvidará dónde habíamos planeado ir el fin de semana, que hablara con su ex, que tratara a otras mujeres como no me trataba a mí, que me humillara de muchas formas.
Yo estaba tan equivocada creyendo que eso debía soportarlo por amor; ahora me cuestiono ¿cuál amor? Ahí no había amor de parte de él, y de parte mía había una manera equivocada de creer como era el amor. Yo creía que atendiéndolo como él me lo pedía, que solucionando sus problemas, complaciendo sus caprichos, dejando que me humillara, permitiendo que las cosas se hicieran a su manera sin yo poder dar mi opinión; eso y más creía que era amor. Estaba tan ciega, quizás digan “no puedo creer que no se haya dado cuenta”. Pues no, no me di cuenta, yo estaba amando más de la cuenta haciendo cosas que no debía, estaba amando demasiado.
Hoy quiero decirte que si piensas que eres una mujer que ama demasiado busca ayuda. No pienses que es pasajero, que olvidarás a ese amor y todo acabará; porque no es así, vas a seguir amando demasiado siempre si no buscas ayuda y pones limite a quien estás amando demasiado.