Stephen Wilkes, un fotógrafo estadounidense, pasó 26 horas frente a un lago en el Parque Nacional del Serengueti, en Tanzania, captando sus maravillas naturales. En total, tomó 2.200 fotografías de ñus, elefantes, hipopótamos, hienas, cebras y suricatas que se acercaban al agua para beber, además del paisaje y los movimiento de las nubes y el sol. ¿El resultado final? Sólo te puedo recomendar que lo aprecies intensamente a continuación:

Esta composición se consiguió con 50 fotos de las que tomó durante ese día de marzo de 2015 en el que no descansó ni por un segundo. Se sobreponen unas sobre otras y dan a imaginar que en cualquier momento aparece Noé para guiar a los animales hasta su barca. La verdad, es que se podría considerar como un simple truco de edición, pero el resultado es maravilloso.
“Estuve tres días mirando el estanque antes de sacar la foto. Veía cómo pasaban las diferentes criaturas para beber agua. Pero no tenía idea de lo que iba a ocurrir el día de la toma”
– Wilkes para Daily Mail. –
¿Qué te pareció el resultado final de su trabajo fotográfico?