Cuando hablamos de una persona inteligente nos referimos a aquella que muy pocas veces se equivoca y que entiende todo el tema de resolver las matemáticas de manera perfecta y rápida (yo no, claro). Una persona así jamás entendería el temor de no tener los mismos resultados que los demás en un examen difícil o el dolor de no saber la respuesta para esa pregunta que está en el examen complicado de tu escuela. Y tampoco creo que entienda estas imágenes que muestran lo típico que te pasa cuando no eres tan inteligente.
1. Una persona inteligente sabría cuánto tiene que dar de propina
2. Y no necesitaría la calculadora
3. Y probablemente no diría cosas absurdas de las que después se arrepienta
4. No odiaría tanto las matemáticas
5. Ni le quitaría “centi” a “centímetros” para hacer el cambio entre centímetros y metros
6. Tampoco borraría una pregunta entera si no sabe qué responder
7. Ni tampoco se rendiría en un examen difícil
8. No es de los que termina primero porque no sabe nada
9. Ni tampoco tiene estos errores
10. No siente miedo después de un examen a la hora de hablar de los resultados
11. Y no se queda en blanco
12. Probablemente sí puede entender todo
13. Y no siente este temor
14. Ni huye de las cosas difíciles
16. Siempre entiende lo que el profesor dice
17. Ni arriesga su vida de forma absurda
18. Sabe qué debe hacer y no hacer
19. Y no hace cosas absurdas que puedan dañarle
20. Ni tampoco hace como que lo supiera todo sin saber nada
21. Aunque es muy probable que una persona inteligente siempre envidie la buena suerte de la persona que no lo es