Puedes salir a comprar vasos. Eso está claro. Sin duda las tiendas nos ofrecen una amplia variedad de lindas opciones. Pero, ¿qué pasa si en lugar de salir a comprar te atreves a hacer algo único con tus propias manos? Además de ocupar la mente y sacar afuera tus dotes artísticos, podrás tener un lindo proyecto para tu casa. Con muy pocos (en serio muy pocos) materiales, podrás convertir unos muy normales vasos en unos excepcionales.
Estos es lo que necesitarás:
- Vasos
- Esmalte
- Platos de plástico
- Varitas de algodón
1. Paso 1: Pon el esmalte en tus platos
Necesitarás más de un plato para lograr variaciones en el color. Un plato para cada color por separado y otro para mezclarlos como quieras.

2. Paso 2: Usa la varita de algodón como pincel para los puntos
Empieza en la base creando muchos puntos. No muy separados para que se vea saturado. Más arriba podrás separarlos un poco más.

3. Paso 3: Gira el vaso a medida que vas poniendo los puntos
Antes de llegar a la mitad del vaso, empieza a separar los puntos para crear un efecto de “desvanecimiento”.

Puedes intentar hacer otros modelos y utilizar distintos materiales como marcadores de colores:



¡A explotar la creatividad!