Es posible que recientemente te hayas hecho esta pregunta. ¿Qué ha pasado para que al escuchar alguna de sus nuevas canciones no cambie de dial inmediatamente como lo solía hacer? No te preocupes, no eres el único, y es que el nuevo disco de Bieber, Purpose, es un éxito rotundo en todo el mundo.
¿Y qué ha cambiado para que ahora me guste su música? Te preguntarás. Muy sencillo. El cantante es conocido por todos. El ya no tan niño Bieber ha generado mucha polémica en sus años como artista, y la mayor parte de las veces por temas poco relacionados con la música. No hace falta irse muy lejos, hace apenas unos meses la lió en su visita a España, pero no le pidamos que sea perfecto, a una Estrella del Pop se le consiente todo.
Y es que del Justin Bieber que se estrenó cantando Baby y con un pelo en forma de casco, han pasado nada más y nada menos que 5 años. Tiempo suficiente para que la madurez se haga notar, incluso en el tema musical.
Y así el joven cantante ha pasado de escribir canciones de estilo R&B, pop o incluso contemporáneo, y ha pasado a otro tipo de música; desde baladas al estilo Ed Sheeran que encandilan a la más Bilieber, hasta música que haría moverse de la silla hasta a tu abuela.
Y claro, iluso de ti, te enganchas a sus canciones antes de conocer su autoría. Su ritmo tan actual y las colaboraciones con grandes DJs, como pueden ser Skrillex o Diplo, te hacen aprenderte la canción y cuando te das cuenta de que es Justin Bieber ya es demasiado tarde. La canción te la sabes y encima te gusta. (Tranquilo, hay cosas peores, no muchas más, pero hay cosas más graves).
En líneas generales, no me extrañaría que el joven canadiense siguiera con esta tendencia, se le ve cómodo con este estilo de música y al público parece que le ha gustado esta renovación que han tomado sus temas.