¿De dónde salió? Nadie lo sabe. Pero hace un tiempo se comenzó a integrar un nuevo accesorio a la rutina de muchos.
Se trata de utilizar una máscara de entrenamiento para ejercitar. Es algo extraño, pues realmente te ves como si estuvieras preparándote para el Apocalipsis. O para escapar de zombies en un ataque nuclear. Cualquiera sea la opción, es bastante raro.
Puede no parecer tener explicación, pero la verdad sí tendría sentido. No te ayudará a sacar más músculos, ni a adelgazar en menos tiempo. Pero sí lograría mejorar tu capacidad respiratoria, y por ende, tu resistencia.
De esta manera podrías ejercitar por periodos más prolongados. Simular el ejercicio en altura, mejoraría tu capacidad pulmonar y ampliar tu diafragma.
Es una teoría, pero no está del todo errónea. Cuando estamos el altura, debemos hacer un mayor esfuerzo por respirar. Lejos del nivel del mar hay menos oxígeno, por lo que nuestro cuerpo debe hacer un esfuerzo distinto para lograr sobrevivir.
Según esto, la máscara de entrenamiento nos ayuda a simular una respiración con mayor dificultad. Al superar el entrenamiento con ella, lograrías tener un mejor desempeño o estado físico al largo plazo.
Nuestro cerebro es sensible a la cantidad de oxígeno que recibimos, que circula a través de nuestra sangre. Esto haría que regulara y/o mejorara la respiración. Probablemente jadees al comienzo, pero de a poco irás superándolo.
Se ve bastante terrorífico, por no decir ridículo. Pero se ha vuelto una tendencia que muchos han probado.
Suena bastante lógico, pero hay algunos expertos que no aprueban este entrenamiento. No sabemos a quién se le ocurrió, pero podría no estar del todo en lo correcto.
“Hemos estudiado el entrenamiento a gran altura y encontramos que no mejora la fuerza muscular respiratoria, o la resistencia, en comparación con el entrenamiento al nivel del mar”.
– Dr. Benjamin Levine, Hospital Presbiteriano de Salud de Texas.
Vamos a ir viendo qué sucede con esta tendencia. Por ahora, puedes probarla en tu próxima rutina. Aunque probablemente sea mejor que tan sólo te quedes igual. ¡Tú decides!