Todos nos imaginamos ese día detalladamente pero cuando llega, realmente nos pilla por sorpresa. Es ese día en el que quieres verte mejor que nunca: el día en el que finalmente te encuentras con tu ex. Pasas meses pensando que lo verás en cada esquina y, en consecuencia, creas extensos planes de escape para evitarlo a toda costa. Sin embargo, con el paso de los meses los sentimientos negativos se acaban y sólo queda esa extraña sensación de sentir que alguien a quien conocías a la perfección se ha transformado en un perfecto desconocido.
Independiente de esos sentimientos, está claro que quieres manejar la situación lo mejor posible, nada de caras raras ni preguntas fuera de lugar, ¿cierto? Sea que tú hayas terminado la relación o él haya decidido irse, no hay nada que impida que este breve encuentro sea por lo menos cordial.
1. Salúdalos de forma cordial, pero evita el contacto físico
Lo mejor es comportarte de forma educada y tratarlo tal como tratarías a alguien que no conoces mucho: con cierta distancia, pero sin ser demasiado fría. Claramente ya no tienes sentimientos fuertes por esta persona, por lo que lo mejor es no darle ideas equivocadas manteniendo el contacto físico al mínimo.
2. Háblales de tu presente brevemente y evita detalles
Si se da la ocasión o si ellos preguntan, habla de tu presente de forma general. Comenta sin mucho detalle ese nuevo trabajo que tienes o cuéntales que todo va muy bien con tu vida. Evita detalles, ya no son parte de tu vida y por lo tanto el acceso a información es limitado.
3. De la misma forma, no preguntes demasiado
Aunque puede que intentes hacerlo para parecer cordial, lo mejor es tampoco preguntar demasiado. Tu ex es tu ex por una razón. Pregunta cosas generales que tengan que ver con la parte menos sentimental de su vida.
4. Intenta no comentar nada de tu vida amorosa
Lo mejor es dejar los límites claros y tu vida amorosa no tiene nada que ver con ellos ahora. Evita preguntarles directamente si están saliendo con alguien y en caso que ellos te lo pregunten a ti responde con un escueto ‘No’ o ‘Sí’ dependiendo de la situación. Mantén tu tono de voz amable pero firme.
5. Termina la conversación antes de que pase a un territorio incómodo
Si notas que ninguno de los dos sabe cómo terminar la conversación o que claramente está pasando a un territorio al que no te interesa entrar dilo de forma clara: no hay nada de extraño en decir que ‘la conversación se ha vuelto un poco extraña’. Aunque si lo prefieres, siempre puedes decir que te tienes que ir porque alguna de tus amigas te espera.
Encontrarse con tu ex no siempre es lo más agradable, pero no tiene porqué ser una tortura tampoco. Es algo que a todos nos pasará más de alguna vez, especialmente si tienes más de una ex pareja. Controla la situación de esta forma y nunca tendrán tema para hablar mal de ti, después de todo, no sólo fuiste una buena novia, sino que además, eres una excelente ex novia.