¿Quién dijo que el planeta Tierra no podía tener aguas de color naranja o amarillo?
El director de cine James Cameron se demoró alrededor de diez años en crear el mundo de la película Avatar y gastó varios millones de dólares en el camino. El resultado fue espectacular, un planeta inmenso, lleno de flora y fauna sin igual en la Tierra. Pero cuando parece que las plantas azules y gelatinosas de ese premeditado lugar son lo más peculiar que podría encontrarse en la naturaleza, la realidad supera a la fantasía.
Aquí hay 26 paisajes en los que el planeta en que vivimos, derrocha la más sicodélica creatividad.
1. Dunas pintadas, Parque Nacional Volcánico Lassen en California
Desde las alturas se ve como un suelo hecho de esponja en el que se puede hacer una caída libre desde muchos metros de altura, pero este es un campo de piedra pómez y sus colores fueron formados por la oxidación de la ceniza volcánica que cayó hace millones de años en el lugar.
2. Géiser Fly, Nevada, Estados Unidos
Esta es una belleza casi natural, pero no por eso es menos asombroso. Corría el año 1916 cuando un grupo de hombres decidió perforar el terreno del desértico sector de Gerlach para encontrar agua para los cultivos y los animales. El agua no les sirvió porque estaba a más de 200 ºC, sin embargo esta acción fue la que dio paso a la formación del géiser. Hoy son varias las vías de escape de este recurso termal, que a su vez le ha dado una serie de colores que dan la idea de estar bajo los efectos de alguna sustancia al mirarla.
3. Cuevas de Waitomo (o de las luciérnagas), Nueva Zelanda
Si llevas una linterna a estas cuevas será el peor error que podrás cometer, porque la luz va por cuenta de la casa. Este asombroso lugar se originó por la presión que ejercieron las corrientes subterráneas sobre la piedra caliza blanda durante miles de años. En muchas de ellas se asoman las Arachnocampa Luminosa, una especie endémica de la zona que brilla en la oscuridad con mucha fuerza e ilumina las paredes de estas cuevas.
4. Pamukkale, en la provincia de Denizli, sudoeste de Turquía
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Un conjunto de jacuzzis al aire libre, perfectamente blancos es lo que ofrece Turquía de forma totalmente natural, pues es una formación geológica con alto contenido de calcio, que es lo que le da ese aspecto tan limpio. Como otros acontecimientos que ocurren en la naturaleza, esta belleza se formó gracias a una serie de terremotos, producto de la falla de la cuenca del río Menderes, que también ocasionaron la aparición de numerosas fuentes de aguas termales.
5. Montañas Tianzi, China
Tierra horizontal: esta es la ilusión que crean estas montañas que cubren 9.000 hectáreas, y que son tan delgadas que hasta pueden parecer árboles gigantescos de otro planeta. Desde Super Mario Bross que no veía plataformas tan raras, aunque estas son mucho más hermosas.
6. Hielo color esmeralda en el lago Baikal, Rusia
Nunca el frío había lucido tan bien. El color esmeralda que tienen estos hielos formados en el Lago Baikal hacen parecer que el suelo estuviera lleno de joyas gigantes por las que puedes caminar.
7. Gran primavera prismática, Yellowstone, Estados Unidos
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Este lugar es la sicodelia hecha naturaleza. Para los que creían que el agua sólo era azul o turquesa en los casos más extremos, esta será una gran sorpresa. Los colores, naranjos y azules confluyen en las que además son las aguas termales más grandes de Estados Unidos, con aproximadamente 75 por 91 metros de tamaño y 49 metros de profundidad. Sus fuertes colores están dados por las algas y bacterias pigmentadas que crecen en sus bordes.
8. Monte Roraima, Venezuela
Llegar a las nubes es la promesa que ofrece este lugar de Latinoamérica. Este es el punto más alto de la cadena de mesetas tepuyes (montañas tabulares) de la sierra de Pacaraima, por lo que si tienes la curiosidad de qué es lo que verías si volaras en Venezuela, esta panorámica podría ayudarte.
9. Cueva Son Doong, Vietnam
Entre tanta historia y guerra fría, en este lugar del planeta podrás descubrir un mundo subterráneo gigantesco. Esta es la cueva más grande del mundo y se mantuvo en lo oculto de la tierra hasta 1991.
10. Playa roja, Panjin, China
Si en una ocasión ves este lugar de color rojo y después lo ves verde, no te preocupes. No significa que eres daltónico, sino que realmente la playa roja cambia de color. Esto es gracias a sus algas que cambian de color en las distintas estaciones del año, otro de los trucos de la naturaleza que te dejarán atónito.
11. Calzada de los gigantes, Irlanda
Si en tu niñez tuviste esos baldes con figuras geométricas para aprender sobre cuadrados y hexágonos, este paisaje te impresionará y también te llenará de nostalgia. Las formaciones de esta calzada se formaron hace alrededor de 50 y 60 años atrás, son columnas de basalto que se fracturaron y convirtieron luego de una erupción volcánica, aunque para los más creyentes, la leyenda cuenta que son los restos de un camino construido por gigantes.
12. Lago Abraham, Canadá
¿Nunca deseaste cuando niño que las burbujas duraran más que sólo unos segundos? En este lugar, ese deseo se vuelve realidad, pues el lago Abraham está lleno de burbujas gigantes congeladas. Están un poco aplastadas, pero al menos están.
13. Volcán Dallol, Etiopía
Un plato gigante de puré es lo más parecido a esta belleza de la naturaleza. Si se le agrega un poco de curry al plato podría llegarse al exacto mismo color de este volcán y sus alrededores.
14. Danxia de Zhangye, China
Un arcoiris dibujado en la tierra, entre los cerros, incluso en los troncos de los árboles, también es algo que existe en la vida real.
15. Cueva de hielo, Islandia
La fantasía de un planeta congelado también existe en la Tierra. Caminar bajo un techo de hielo, tocar muros de hielo y caminar sobre hielo, si tienes cuidado de no resbalarte, será una experiencia única.
16. Lago Retba, Senegal
Como si Barbie hubiera hecho de las suyas en esta península, las aguas tienen el mismo rosado que su auto, su casa, su ropa y todo lo que se crea para ella. Todo un lago para niñas.
Como si Barbie hubiera hecho de las suyas en esta península, las aguas tienen el mismo rosado que su auto, su casa, su ropa y todo lo que se crea para ella. Todo un lago para niñas.
17. Árboles Dragonblood, Yemen
La tierra de los hongos gigantes también existe en nuestro planeta. Estos no se comen ni te dan vidas extra, pero sí que se ven bonitos.
18. Mina Naica, México
Si tienes la intriga de conocer a un pescado por dentro, este lugar te dará una idea de cómo sería. Esta mina parece estar llena de espinas gigantes, aunque en realidad es un salón lleno de cristales que salen en todas las direcciones y ángulos posibles. Un desorden de los más brillantes que encontrarás.
19. Desierto Namib, Namibia
Y si hay un lago naranja, ¿por qué no podría existir una duna gigante que parezca del mismo color? Definitivamente no hay razón para que no la haya.
20. Puertas del infierno, Turkmenistan
Si sientes que no te has portado lo suficientemente bien en tu vida, puedes hacer un ensayo de cómo podría ser la eternidad cuando dejes este mundo, o tal vez sólo por curiosidad. Para muchos, esta cueva con gases tóxicos de Turquía es la visión más concreta de el temido inframundo.
21. Glaciar Skaftafell, Islandia
Si dijeran que esa es la luna, sería fácil de creer a primera vista, aunque mirando bien, bien podría encontrarse el anillo de Frodo del Señor de los Anillos en estos parajes.
22. Cueva de Algarve, Portugal
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Un techo igualito al de los escenarios de los primeros episodios de la Guerra de las Galaxias, pero con la diferencia de que fuera de él se ubica una playa paradisíaca irresistible. Ya hubiera querido Chewaka filmar en esta locación.
23. Lago Osoyoos, Canadá
Los círculos fueron la última moda de los años 70, pero en Canadá aún se mantienen en plena vigencia. El lago de Osoyoos es una superficie de motitas que las tribus indias del próximo Valle de Okanagan consideran sagrado… aunque además también es muy groovy.