Billie Jo Stratton de 70 años fue diagnosticada con cáncer de pulmón en etapa 4 en septiembre de 2014 y en ese momento le dijo a su hija que quería ver dónde trabaja, dónde vive y por supuesto, quería estar allí para verla casarse con el amor de su vida. Ella decidió cumplirle todos los deseos a su madre, pero de una forma única para todos.
Kristy Stratton de 41 años ha sido azafata de Alaska Airlines por 11 años, y justo en un trayecto de Los Angeles a Seattle, conoció a su media naranja, Jim Larsen. Tiempo después se mudaron juntos a Seattle y ahora, 6 años después por fin se casaron.

Pero no fue una boda normal, contrajeron matrimonio en el mismo vuelo donde se conocieron. La idea se le ocurrió a ella, quien apenas un mes antes de la boda pensó que sería genial casarse de esa forma, según indica el sitio web Today.

De inmediato pusieron manos a la obra y arreglaron todos los detalles para que el evento se pudiera dar. Además contactaron a la fotógrafa Christina Frees, quien dijo esto del suceso:
“Definitivamente fue la más original boda que me han pedido fotografiar. Cualquier boda depende de las preferencias personales, pero esta fue obviamente especial por muchas razones”.
Todo estuvo muy cuidado. Incluso a los demás pasajeros se les repartieron rosas y un dulce en específico que fue el primero que Larsen le regaló a Kristy. ¡Parece que él nos deja en vergüenza a todos los hombres!

Después de una hora de vuelo, una azafata tomó el altavoz y dio un poco de información sobre la pareja. En un acto demasiado tierno, ellos intercambiaron anillos, mientras la mamá Billie Jo estaba enfrente de ellos.
Momento después dijeron la gran palabra: “Acepto” y el avión se llenó de dicha y alegría.
“En verdad fue genial ver personas uniéndose para celebrar a completos extraños”.
-Frees-

Ahora Kristy indica que “mi mamá ha estado sonriendo por semanas. Me encanta”. Además que “La boda realmente aumentó su animo y ahora ella está pasando tiempo con nosotros en Seattle”.
El día siguiente de la boda, ellos tuvieron una reunión con 60 amigos y familiares. Luego pasaron los siguientes días enseñándole a Billie la ciudad.

Aunque con eso hubiera bastado para convertirse en un momento inolvidable, aún no ha terminado. La pareja planea tener su luna de miel en Islandia.
Una de esas historias donde cada detalle sale de la mejor manera. ¡Me hubiera gustado ir en ese vuelo!