Podrá sonar descabellado e incluso como lo último que a cualquier pareja sensata se le podría ocurrir, pero que cada uno tenga la oportunidad de viajar solo es en realidad más que positivo para una relación estable. Alista tu maleta y elige el destino que quieras, ¡sin consultarlo con alguien más!
1. Evita la ‘codependencia’
Te darás cuenta de que está bien estar solo y establecerás la diferencia entre ‘querer’ estar con alguien y ‘necesitar’ a alguien.
2. Puedes tomar un respiro
No está mal tomar un descanso del tiempo en pareja. Podrás hacer lo que quieras sin necesidad de estar de acuerdo con otra persona. Tómate todo el tiempo que quieras para mirar obras en el museo o duerme un día entero en la habitación del hotel. Es TU tiempo.
3. Descubrirás nuevas habilidades
Es usual que en una relación se dividan las responsabilidades pero el hecho de viajar solo implica estar al tanto de todo. Al final de tu aventura te darás cuenta de que eres capaz de hacer muchas más cosas de lo que imaginabas.
4. Será más interesante conocer gente sin que haya sexo de por medio
Disfrutarás de la compañía de otras personas de forma genuina, sin motivos secundarios.
5. Tu relación evolucionará
Un viaje sin tu pareja puede ser el escenario ideal para que te llenes de dudas, pero afrontarás una prueba definitiva al conocer gente que, lejos de la rutina, parecerá muy interesante; sin embargo, la clave está en saber lo valiosa que es esa persona que te espera en casa. Sin duda la confianza se fortalecerá.
6. Será bueno extrañar a tu pareja
Te gustará hasta lo que te molestaba. Bueno, no todo.
7. Alguien te espera
Sólo piensa en lo felices que serán cuando se vean de nuevo.
¿Qué destino se te antoja?