El matrimonio es un día muy importante para las personas que deciden comprometerse a pasar el resto de su tiempo junto al amor de sus vidas. Lo más emocionante del matrimonio, es que es un hito que marca un antes y un después en las relaciones. Aunque esta novia de Massachusetts y su esposo, lamentablemente no podrán recordarlo con mucha felicidad… ¿Quieres saber por qué? Sigue leyendo:
El 19 de septiembre del 2015, Jill Hawkins se despertó con una extraña sensación en su estómago… Pensó que solo eran los nervios, porque ese era el día en que se iba a casar, pero resultó ser algo mucho más complicado.
Caminó por el altar, aceptó a John como su esposo e incluso se dio el tiempo de posar para algunas fotos, a pesar de apenas mantenerse de pie. Luego de un tiempo, su dolor era tan grande que no tuvo otra opción que recurrir de emergencia al hospital.
Ahí fue operada por una torcedura en su intestino, que según el doctor que realizó la operación, podría haberla matado.
Según lo que cuenta Jill en un noticiero de EEUU, ella sufrió de colitis ulcerativa por muchos años, sin embargo, luego de tanto tiempo y varias operaciones… Pensó que su enfermedad había quedado atrás. Lamentablemente, las consecuencias de esta enfermedad decidieron manifestarse justo para el día de su matrimonio.
Jill sostiene que aún le cuesta creer lo que le pasó, pero está totalmente fuera de peligro tras la operación. Aunque podrías decir que su matrimonio puso a prueba bastante rápido la parte de “en la salud y en la enfermedad”, ahora este recuerdo es solo un gran susto para la pareja.