Está más que comprobado que para las mujeres el cabello es como un hijo. Tú misma lo haces crecer, sale desde el interior de tu cuerpo, lo limpias, lo nutres y lo cuidas constantemente, pero ¿qué haces cuando tu hijo es extremadamente insoportable? Una aproximación a eso, fácilmente podría ser tener que convivir con una cabellera demasiado fina. Y aunque para algunas puede sonar fascinante, los siguientes problemas pueden demostrarte lo contrario:
1. El pelo mojado podría verse sexy en prácticamente todo el mundo, EXCEPTO en ti

2. No lavarte el pelo por más de un día es lo mismo que lavártelo con grasa de motor

3. Por cada pelo que pierdes en la ducha dices algunas palabras porque será recordado por siempre

4. Irte a la cama y despertar con el pelo desenredado es solo un sueño que puedes tener mientras se convierte en un nudo gigante

5. Los sujetadores para el pelo rara vez han logrado sujetar tu pelo, generalmente solo se deslizan por él como si estuvieran en un tobogán

6. Y nada se compara al dolor de quitarte un coletero que sí sabe hacer su trabajo

7. ¿Extensiones? Sí, claro… Como si tu delicado cabello algún día fuera a soportarlo

8. La estática es tu peor enemiga. LA PEOR

9. Y el encrespado es uno de sus aliados en la misión de arruinarte la vida

10. Volumen es una palabra que tu pelo no ha llegado a conocer y probablemente nunca lo haga

11. Tener el pelo fino y además rizado ¡Eso sí que es una bendición! Buena suerte con eso

12. Tus peinados no saben lo que es mantenerse por más de una hora

13. Tus trenzas siempre han sabido cómo desarmarse por voluntad propia

14. Recurrir a tu pelo para mantenerte con calor en invierno ni siquiera es una posibilidad

15. Ves todos los comerciales de productos para el cabello sabiendo que nada funcionará en el tuyo

16. Y con todo el pelo que tengas siempre sentirás que te ves calva

17. A veces incluso desearías serlo y quedarte sin pelo, porque es demasiado

18. Pero tu sufrimiento te ha hecho una experta en cabello fino y no hay nadie que pueda sacarle provecho como tú
