Una mejor amiga no tiene necesariamente que ser alguien con la que has estado desde la guardería; es esa persona que esté donde esté, en algún momento de tu vida aparecerá y será tu alma gemela. Pero aun así es como si la conocieras de toda la vida. Es esa persona tan igual a ti, que cuando le das un consejo es como si en realidad te lo estuvieras dando a ti mismo.
Es esa que cuando tiene cualquier problema, te centras tanto en él, que parece tuyo. Es esa persona que nunca te va a dejar sola a pesar de todo. Es esa persona con la que estar enfadada más de un par de horas es imposible, pues ni el orgullo propio lo consigue. Es esa persona que por muy lejos que esté de ti, la distancia no significará nada.
Es esa persona que puede hundirte sólo con abrir la boca en cuestión de segundos, pero que con una mirada de las suyas la conversación cambia a la más absurda del mundo. Es esa persona con la que haces planes para cuando sean viejitas.
Es esa hermana de otra sangre.