Ya de por sí, ver el nacimiento de cientos de tortugas bebé debe ser una de las experiencias más asombrosas que alguien puede vivir. Sobre todo por lo que conlleva este “milagro de vida”. Para empezar las madres de esos pequeños tuvieron que guiarse por los campos magnéticos hasta llegar al exacto lugar en el que ellas mismas nacieron para colocar sus huevos. Los enterraron bajo tierra, esperaron a que se desarrollaran saludables y protegidos de los posibles depredadores –y humanos– y una vez que nacen, son ellos los que deben encontrar el camino al océano por su cuenta e intentar sobrevivir. Porque sí… lamentablemente deberán enfrentar muchos obstáculos y sólo una de cada 1.000 tortugas verdes sobrevivirá.
Ahora suma a esto, que en uno de estos nidos aparezca una tortuga completamente blanca. ¡Incluso más increíble!
En la costa de Queensland, Australia, un grupo de voluntarios de vida silvestre se encontraban monitoreando los nidos de tortuga verde a los que habían mantenido protegidos todo este tiempo y cuando al fin llegó el momento de que las tortugas comenzaran a salir de sus cascarones tuvieron un inesperado avistamiento. Entre aquellas tortugas una de ellas destacaba por sobre las demás: ¡era albina! La primera tortuga albina que veían en los últimos 9 años.
“Las crías albinas son extremadamente raras. Probablemente ocurren en una tasa de una en muchos cientos de miles de huevos que son colocados”
–Col Limpu, científico de Queensland–
Fue la última tortuga del grupo de más de 100 tortugas, en nacer. La llamaron Alby, grabaron este inusual acontecimiento y dejaron que se fuera junto a sus hermanos al océano.
“Era hermoso, podías ver que sus aletas eran de color rosa por su sangre que fluía. Sólo espero que sobreviva en el océano. Era bastante rápido y estaba muy determinado en entrar al agua”.
–Jayne Walton, uno de los testigos de su nacimiento–
Lamentablemente, la vida para Alby no será fácil. Además de enfrentarse a varias amenazas que incluyen a depredadores, la contaminación de los océanos y los accidentes con artículos de la pesca comercial, esta tortuga no contará con su capacidad de camuflarse en el fondo marino; al ser albina llamará más la atención en el océano y será más vulnerable ante sus depredadores.