Si eres de los que cree que deportes como el surf y la ciencia no tienen nada que ver, ésta es la prueba más clara de que estabas equivocado. Por suerte, la leyenda viva del surf mundial, Kelly Slater, tenía claro que ambas ramas van muy de la mano y se atrevió a unirlas en el proyecto que empezó el 2005 y que, tras 10 años de trabajo, vio materializado: la mejor ola artificial del mundo.

“Es mucha presión, trabajar en algo por 10 años, pero si sale bien, será algo importante para el surf”.
-Kelly Slater-

Aunque pudieron haber hecho una ola más pequeña, prefirieron seguir por diez años seguidos para conseguir lo que buscaban: una ola de elite.
