Escúchame bien y escucha con atención, eres una mujer bella, fuerte e inteligente. A ti que siempre has estado luchando por crecer como persona y por dar todo por tu familia y no has podido avanzar por ese amor que te ilusionó tantos años y al final no supo valorar lo que tenía, una mujer hermosa en todos los aspectos, que lo único que pedía era alguna caricia a cambio, algún cumplido para que florecieras, pero a cambio pasaron los días y él sólo te fue quitando pétalos, tu esencia y todo lo que eras se fue yendo en el aire.
¿Dejaste de ser tú sólo por esa persona? Levántate y vuelve a ser quien eras con esa sonrisa tan grande y esas ganas de querer comerte al mundo, abandona lo que no te deja ir más allá, pues eres una perla brillante que nadie podrá quitarle el brillo siempre y cuando tú estés dispuesta a seguir adelante. No pienses que él cambiará, que él te dará lo que siempre quisiste, pues tuvo su oportunidad tantos años y jamás se molestó en dártelo, no pienses en lo que perderás; al contrario, ganarás todo lo que tú habías perdido, ganarás el cariño de ti misma, pues lo que vale más… eres tú.