A la hora de tomarnos una Selfie, no todos tenemos el talento de Kim Kardashian. El teléfono de última generación con la cámara de más megapixeles, o el “palito selfie”, tampoco ayudan siempre. A continuación, algunos ejemplos de lo pésima que puede llegar a ser una foto. Algunos se lo deben a su insensibilidad, otros a riesgos innecesarios y otros… bueno, simplemente es mejor que se mantengan alejados de los flashes:
1. Esta estudiante de medicina sin corazón:
Sucedió el pasado mes de agosto en México. La chica no encontró nada mejor que sacarse una selfie con un paciente que estaba agonizando. ¿Quién dijo humanidad?
2. Otra chica sin corazón:
Como muchas otra personas que se tomaron una foto justo después de una explosión mortal en Nueva York.
3. Uno que se quiso hacer el valiente:
¿Acaso creyó que los leones marinos eran tan dóciles como los gatos a la hora de sacarles una foto?
4. Este motorista:
La policía de Queensland sorprendió a éste motorista manejando y tomandose una selfie al mismo tiempo. La gracias le costó 706 dólares por la infracción.
5. Esta selfie revolcada:
Al menos aprendieron que un auto en movimiento no es el mejor escenario para un palo de selfie.
6. Esta selfie de un brillante ladrón:
Robar un banco poco después de salir de la cárcel no parece muy inteligente, ¿no? Pero hay algo más aún peor: subir las fotos con el botin a tu página de Facebook. John Morgan, de Ohio, sacó todas esas brillantes ideas de su cerebro, y al final volvió a la cárcel antes de lo previsto.
7. Otra valiente:
El parque de Colorado se vio obligado a cerrar porque el público no dejaba de tomarse selfies con los osos…
8. Más audaces:
En la estación ferroviaria Matlock Bath en Derbyshire, Reino Unido. Muchas personas decidieron que el mejor ligar para tomarse una selfie eran las vías activas del tren.
9. Todo por la selfie más original:
Este estudiante de ingeniería no se conformó con una selfie frente al espejo del baño y decidió que trepar por la estructura del puente Broklyn para inmortalizar el momento. La aventura se terminó cuando la policía le detuvo.
10. Mención honrosa:
Esta no es una selfie, pero coincide en el espíritu y merece una mención especial. Hemos visto un montón de veces como el fondo estropea una foto sexy, pero no es lo mismo que se vea un montón de ropa sucia a que aparezca tu hija pequeña retratándote encuerada.