“Masacrados” era todo lo que decía el titular de un periódico local, cuando en el año 2004, los zorros mataron a 180 pingüinos azules en la Isla Middle, frente al estado de Victoria, en el sur de Australia. Un episodio lamentable, pero que estaba lejos de acabar, ya que para el 2005, los 800 ejemplares que alguna vez habían cubierto la isla, se reducían a 10.
En el año 2000, una corriente natural del mar provocó un aumento de la acumulación de arena y permitió que los zorros rojos comenzaran a cruzar desde el continente:
Los zorros rojos simplemente habían ganado la batalla contra esta pequeña colonia. O por lo menos eso se pensaba, hasta que a un criador de gallinas local conocido como Allan “Swampy” Marsh, se le ocurrió una forma novedosa con la que proteger a las aves.
¿Y cuál fue la solución que se le ocurrió? Utilizar a sus perros ovejeros para mantener a los zorros lo más lejos posible.
“De inmediato vimos un cambio en el patrón de los zorros. Al poner un perro en la isla, cambió la jerarquía. Los zorros pueden oír los ladridos, olerlos y alejarse. En los 10 años con los perros en el lugar, ni un pingüino ha muerto por esta causa”.
– dijo Peter Abbott, del Proyecto de Conservación de los Pingüinos.-
Hoy, la población de pingüinos en la Isla Middle supera los 200 ejemplares, y el éxito de esta simple solución, ya se está implementando en otras localidades de Victoria, sin dejar de mencionar que inspiró una película australiana llamada “Oddball”, que fue estrenada en septiembre de 2015.
Imágenes de la película Oddball:
PD: Oddball es el nombre de la hija de Ben, el primer perro ovejero maremma que Swampy Marsh tuvo en su granja. Oddball fue criada para proteger y vivir entre los pingüinos, se convirtió en una verdadera leyenda local, y bueno, inspiró al mundo con su trabajo. Actualmente tiene 14 años, está retirada, y vive en absoluta paz y tranquilidad, en la casa de Marsh.
La verdadera Oddball junto a Allan “Swampy” Marsh:
A raíz de todo esto, los grupos locales que administran el Proyecto de Conservación de los Pingüinos, lograron recaudar más de 18.000 dólares para comprar y entrenar dos nuevos cachorros de maremma.
¿Qué te pareció la historia de estos perros ovejeros y los pingüinos a los que protegen?