Uno de los días más esperados para las mujeres saudíes llegó. Ya se había anunciado, pero había que verlo para creerlo. Por primera vez en la historia de Arabia Saudita, hombres y mujeres pudieron votar por igual.
Si bien las elecciones son municipales, es un gran paso en un estado en el que siguen habiendo grandes prohibiciones. Las mujeres deben estar acompañadas de un hombre para la mayoría de sus tareas. Tampoco pueden manejar ni usar maquillaje. De todos modos, ayer pudieron ejercer este derecho básico.

El rey Abdalá bin Abdelaziz, fallecido en enero del 2015, fue quien en 2011 autorizó el voto femenino para estas elecciones. Desde entonces, se estaba esperando el momento en que se hiciera realidad. No sólo es el sufragio, sino que también representantes femeninas podían postular a puestos municipales.
Este 12 de diciembre, las sauditas salieron a respirar un poco más de libertad. Es el primer paso de muchos, o al menos eso se espera. Luego de este paso, el único estado que aún no permite a las mujeres votar, es el Vaticano.

Debido a que son las terceras elecciones municipales (una en 2005, otra en 2011), y la primera en la que asisten mujeres, la convocatoria fue baja. Esto demuestra la falta de conocimiento acerca de la democracia. Sólo un 25% de la población asistió a las urnas, pero sigue siendo un avance.
17 de las postulantes a cargos municipales fueron electas. En total eran 865. Aún sin poder dar discursos, porque las mujeres tienen prohibido hablar frente a muchas personas, hubo varios triunfos. Las nuevas concejales corresponden a las ciudades de Jeddah, Tabuk, Ahsaa, Qatif, e incluso la Mecca, el centro de peregrinación más grande del Islam.
De todos modos, la mayor victoria fue lograr la participación, no las cifras en sí.

“Creo que es genial que varias mujeres hayan ganado en distintas regiones de Arabia Saudita. Muestra cómo ha progresado la sociedad Saudí en, no sólo aceptar, sino apoyar a las mujeres en trabajos públicos, y esto podría implicar que más cambios están por venir“.
– Maha Akeel, escritora.
Es el primer paso de muchos. Este país está al debe en muchos derechos básicos, tal como lo es la libre expresión. Su población espera que con este primer paso, tanto la monarquía como los hombres comiencen a aceptar más a las mujeres. Y que la discriminación ya no sea un patrón en su sociedad.
Una de las ganadoras, Rasha Hefzi, expresó su alegría tras el triunfo inesperado. Hefzi es una empresaria conocida y ganó como concejal de Jeddah. Tiene como norte seguir luchando por más.
“Lo que hemos comenzado, continuará”.
Muchas de las mujeres que participaron debieron hacerlo por redes sociales, ya que no podían dar discursos. Aún así, tuvieron éxito. Mucho nos queda por ver y esperar de este primer gran cambio. Pero el panorama se ve esperanzados.