El 9 de diciembre de 2012, los clientes de la tienda Ikea en la ciudad de Toronto, Canadá, no podían creer lo que estaban viendo sus ojos. Se trataba de un pequeño mono con abrigo que deambulaba por la zona de los estacionamientos, estaba algo nervioso, daba la sensación de que estaba llorando y buscaba a alguien.

Por lo que se concluyó de la extraña aparición, el adorable monito había acompañado a sus dueños a hacer las compras, quedó esperando en el automóvil y se escapó por una ventana, quedando expuesto. Sus dueños lo reclamaron esa misma semana. Sin embargo, los empleados de Ikea que lo atraparon, lo llevaron de inmediato a un refugio para animales, pensando en que tuviese un mejor futuro.

Desde eso ya han pasado 3 años, y este macaco japonés llamado Darwin, gracias a todos los cuidados que ha recibido en el Santuario de Primates Story Book Farm, de Oshawa, Canadá, pasó de ser un bebé desconfiado y temeroso, a convertirse en un adolescente feliz, sociable con otros monos, que ama la mantequilla de cacahuate y lanzar lejos sus juguetes.

“Darwin podría estar listo para unirse a una “familia” de su especie. Tenemos la intensión de presentarle a dos macacos, Cody y Puglsey en el corto plazo”.
– dijo Daina Liepa, una voluntaria del santuario –

¡Quien lo diría! Gracias a su escape maestro hace 3 años, Darwin tiene un futuro muy prometedor. Y quién sabe, algún día incluso, podría volver a su verdadero hogar en la jungla.
¿Qué te pareció la historia de este mono con abrigo?