Amy Giberson y Justin Pounders se conocieron en línea hace un tiempo. Reunidos en un sitio de citas, hablaban a diario por chat. Luego por teléfono. Hasta que por fin tuvieron su primera cita. Ambos eran oriundos de la ciudad de St. Petersburg, en el estado de Florida. Y desde esa primera cita, ya se sentían los fuegos artificiales al rededor.
Pero lo que los dos no sabían es que su historia había comenzado mucho antes, sin que lo recordaran.
Su primera cita fue hace un año y ya están comprometidos. En el camino de este gran amor, ambos se dieron cuenta de algo: se conocían desde niños. ¡Habían sido compañeros de kindergarten! Y para más, se habían gustado cuando eran niños.
“Estábamos en el auto y Justin, casualmente, mencionó que le encantaba mi nombre porque tuvo un enamoramiento con una chica llamada Amy en preescolar. Después yo bromeé, ‘Bueno, no era yo, así que no quiero oír de ella'”.
“La mamá de Justin encontró una fotografía de los dos juntos y comencé a llorar, estaba extasiada. ¡Yo era la Amy que a él le gustó hace tantos años! Definitivamente éramos el uno para el otro”.
Parece de película, pero es real. Ya se habían enamorado y estaban en una relación estable. Pero saber que se habían conocido hace años, y se habían gustado, fue realmente el más grande detalle.
Ambos tenían 3 años cuando compartían las clases, y 30 años después, se van a casar. No importó que él se mudara a otra ciudad, se reencontraron. Aunque eran muy pequeños, recordaban que sentían esa atracción infantil, y eran grandes amigos.
“Se divertían muchísimo. Era un romance tierno y silencioso. Se gustaban a lo lejos, porque era un amor joven, como un dulce enamoramiento, ¿sabes? Insistían en sentarse juntos en la fotografía escolar”.
– Diane Twar, educadora de preescolar de Amy y Justin.
Hace poco se comprometieron, y han compartido su dulce historia con el mundo.
“Algo o alguien definitivamente decidió que no debíamos reconectarnos hasta ahora. Estuvimos tan cerca de encontrarnos hasta ahora, pero no lo hicimos hasta que fue el momento adecuado. Y ese es ahora”.
– Amy Giberson.
¡La mejor de las suertes para estos tórtolos con historia de película!